Terapia Breve y Cursos

2
junio
2017
2 junio 2017

Terapia Breve Centrada en Soluciones: ¿Qué podemos hacer cuando “nada ha mejorado”?

El malestar frecuentemente opaca el bienestar. Hace que cualquier intento luzca inútil, menor, insignificante. Podemos transcurrir la semana con 5 días buenos y 2 malos y, por costumbre, elegiremos ocupar el tiempo y pensamiento en esos dos días malos: son los que más fácilmente se pegan en la retina y sólo tenemos visión para ellos.

A la pregunta “¿Qué ha ido mejor?”, con la que iniciamos las sesiones posteriores a la primera, algunas personas suelen responder que “nada, más bien todo ha empeorado”.

¿Qué podemos hacer cuando esto sucede?

Veamos:

Jorge: Cristina, cuéntame, ¿qué ha ido mejor esta semana?

Cristina: Nada

Jorge: ¿Y cómo has logrado que las cosas no se pongan peor?

Cristina: Están peor.

Jorge: Entiendo, pero no deja de sorprenderme que con esta situación hayas logrado hoy estar aquí.¿Cómo lo has hecho? ¿Cómo vienes afrontando este momento?

Cristina: Bueno, una mañana me desperté y me dije: “Voy a empezar de nuevo”, con la esperanza de que ese día sería mejor. Un par de días esto funcionó: ordené mi habitación y seguí el plan que había hecho para el día.

Jorge: Eso suena bien, ¿cómo te animaste a hacerlo?

Cristina: Fueron las ganas de hacer bien las cosas, ese día me levanté temprano, puse mi despertador. Ocupé mi día en mi proyecto personal, visité a una amiga que acababa de dar a luz, fui al centro de la ciudad, cociné pollo a la plancha con arroz y ensalada, siguiendo mi dieta. Esto sucedió el 28 de febrero.

Jorge: ¿Y hubo otro día en que las cosas también hayan marchado así, mejor?

Cristina: El 1 de marzo: me levanté, ordené mis cosas, revisé mi mail de la universidad que no revisaba desde hace dos meses, fui a comprar unas cosas a Gamarra, asistí a la graduación de mi padre y salí por la noche con una amiga, fuimos a comer a un restaurante, a cantar y a bailar.

Jorge: ¡Wow, qué sorpresa! Hiciste tiempo para hacer varias cosas. ¿Qué necesitaste? ¿Cuál fue la clave?

Cristina: Darme un empujoncito para ordenar mi habitacion porque quería conseguir el permiso de mi madre. A la graduación tenía que asistir, y salí con mi amiga porque esta semana no iba a poder hacerlo, así que preferí adelantarlo para el sábado.

Jorge: Y eso parece haberte tomado trabajo, ¿cómo lograste organizarlo? ¿Cómo llegaste a esa decisión?

Cristina: Siento que poco a poco están empezando a salir bien las cosas, tengo los días planeados y estoy empezando a ordenarme para llenar los días y estar distraída.

Jorge: ¿Cómo se te ocurrió hacerlo?

Cristina: Me deprime no hacer nada, cuando no hago nada siento los días muy vacíos y tristes. Aunque me sienta como un trapo quiero distraerme en algo y mantenerme ocupada en alguna cosa.

Jorge: ¿Qué has descubierto que resulta útil?

Cristina: Salir y distraerme, bailar, y juntarme con mi familia a conversar.

CONCLUSIÓN

Las personas tienen serios argumentos para señalar que nada ha cambiado y las cosas incluso han empeorado. Pero si consideramos que el cambio es constante, que las personas son competentes y siempre están intentando salir adelante y hacer que las cosas se pongan mejor, vamos a encontrar alguna excepción. Solo se trata de hacer la pregunta adecuada, que generalmente se relaciona con descubrir las estrategias de afrontamiento que viene usando la persona. Siempre hay una respuesta para esos malos momentos. Frente a los problemas y las circunstancias difíciles encontramos que las personas están siempre motivadas a hacer algo diferente, sólo que bajo la percepción de estar haciendo algo inútil o hasta insignificante. Siempre hay momentos en los que la persona esta haciendo algo que signifique una solución, así que hay que interesarnos por saber qué es lo que funciona y visibilizarlo, obteniendo todos los detalles para seguir vinculados en una conversación libre del problema.

Comentarios

Jorge Ayala