Terapia Breve y Cursos

5
mayo
2017
5 mayo 2017

Qué puedo hacer cuando tengo dificultades usando Terapia Breve Centrada en Soluciones

Hacer terapia breve centrada en soluciones consiste y tiene que ver con saber construir soluciones que encajen con el futuro deseado y el modo de hacer de las personas. No se trata de “buscar” cualquier solución sino más bien construir soluciones “customizadas”. Son las personas las que conocen muy bien sus propios universos subjetivos que son totalmente únicos: es el cliente el experto en su propia vida.

Nuestras experiencias como terapeutas pueden ser buenas y variadas, se nos pueden ocurrir las mejores ideas y ocurrencias pero todo eso será siempre nuestro conocimiento y no encajará completa y perfectamente en la vida de las personas. Esta es la razón por la que no damos consejos sino que ayudamos con nuestras preguntas a que las personas puedan desarrollar sus propias posibilidades y conocimientos para adaptarse a una situación como desearían.

Usando el enfoque centrado en soluciones es la persona la que decide qué necesidades debemos abordar, no el terapeuta. La razón por la que algunos procesos han sido derivados a mi consulta y la sorpresa de que el trabajo haya sido útil, habiendo mantenido una brevedad algunas veces increíble para “una situación tan compleja y difícil”, es que otros procesos y terapeutas intentaron descubrir lo que existía detrás del problema. Sospecharon que no existían recursos ni “habilidades sociales” disminuyendo su confianza en las personas, comenzando a trabajar con algo que no respondía a la petición y las expectativas iniciales de la persona en consulta.

En nuestra práctica, no nos resulta útil tener tales creencias y supuestos sobre las personas.”

Lo que hacemos cuando hacemos terapia breve centrada en soluciones es respetar y honrar a la persona como experta en su propia vida, sin hipotetizar argumentos y justificaciones, ni inventando un gran historial en base a los antecedentes conductuales. (Algunos y algunas terapeutas hasta se animan a inventar prontuarios.)

Trabajamos en todo lo que resulta únicamente importante para la persona, pensando en lo que quiere para su propio futuro. Nos mantenemos flotando en la superficie y trabajamos con lo que la persona quiere desarrollar.

Ver a las personas como expertas en su propia vida y relacionarnos desde este principio es confiar en que la persona cuenta con los recursos y las competencias necesarias para construir una solución. Esta confianza es la premisa central del enfoque centrado en soluciones y se complementa con esta otra: suponemos incluso que la persona ya ha tenido experiencia con la solución pero quizás lo ha olvidado

De manera que nuestra trabajo se convierte en un esfuerzo para generar un marco en el que las personas puedan enfocar su atención en las áreas de su experiencia, colocando en la acción sus competencias, recursos y conocimientos de manera intencional. Que las personas re-descubran sus recursos, los activen y encuentren respuestas y soluciones a sus preguntas es empezar a tener confianza nuevamente en ellas mismas.

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Jorge Ayala